Numerosos factores impactan sobre los precios de productos de la canasta básica, desde el tipo de cambio hasta los costos logísticos. En vista de la situación crítica de bajante del Río Paraguay, nuestro diario consultó con el Centro de Armadores Fluviales y Marítimos (Cafym) qué incidencia tiene la situación actual de aguas bajas sobre los precios.

El presidente de Cafym, Raúl Valdez, informó a ABC que prácticamente ya se está llegando a otro récord histórico de bajante del río Paraguay, por lo que las navieras incluso se están preparando para hacer los transbordos en Pilar, en caso de que no se pueda llegar al Puerto de Villeta. ¿Qué significa esto? Que en vez de traer toda la carga en una sola embarcación grande, se necesitarán varias pequeñas para distribuir la carga.

Precisamente, hoy ya se registra una pérdida de capacidad de carga de las embarcaciones en aproximadamente 40%, en la zona sur entre Pilar y Villeta. Es decir, en lugar de que estén cargadas al tope, sólo pueden llevar el 60% del volumen de capacidad.

Esa situación ya está generando sobrecostos al comercio exterior paraguayo, según adelantan. Ante esta situación, consultamos a Valdez si el precio de los productos importados registrarían una suba de precios más adelante.

Esta fue su respuesta: “Son sobrecostos que se deben asumir entre todos los actores de la cadena”, expresó Valdez en contacto con ABC Color.

Es decir, confirmó que sí podrían darse aumento de precios de determinados productos importados. En tal sentido, entre los más importantes que trae Paraguay únicamente del exterior se encuentra el combustible, que a su vez tiene impacto en el flete de todos los productos.

Algunas barcazas varadas en el Norte

El gremialista destacó que en la zona norte, concretamente en el tramo entre Vallemí y Concepción, ya se tiene dificultades para navegar, pero que pese a ello siguen saliendo las embarcaciones, aunque algunas ya están paradas.

El presidente de Cafym también señaló que si bien se están haciendo los trabajos de dragado, definitivamente los pronósticos no son para nada alentadores y eso podría terminar afectando al normal desarrollo del comercio exterior a través de la hidrovía.

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Aseveró que habrá una sequía prolongada, una bajante muy anticipada y que tocará niveles bajos históricos nunca antes registrados. “Nos estamos preparando para eso y también hay medidas alternativas para en caso de que eso ocurra, de que no se pueda llegar hasta los puertos de Villeta, también existen otras medidas como por ejemplo el transbordo de productos en el puerto de Pilar”, enfatizó.

Se viene haciendo un dragado preventivo

El Ministerio de Obras Públicas y Comunicaciones (MOPC) informó que tiene tres contratos vigentes con la misma cantidad de empresas para el dragado del río Paraguay y que con esto se buscó atender la crisis de bajante de manera anticipada. Estos trabajos se adjudicaron en noviembre 2022 se prevé su finalización recién en enero del año 2026.

Dichas contrataciones fueron por un monto total de G. 372.800 millones, que es el presupuesto más alto que destinará la institución en la hidrovía en toda su historia, atendiendo a que el último contrato del dragado fue por G. 84.900 millones. De este monto, el 47% ya se ejecutó hasta finales de julio, por lo que el saldo vigente es del 53% del monto total del contrato.

El lote 1, que va desde la zona de Asunción hasta alcanzar su confluencia del cauce con río Paraná (rumbo norte a sur) fue adjudicado a la empresa Ingeniería de Topografía y Caminos (T y C), de Francisco Griñó, por un monto de G. 122.800 millones.

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El lote 2, para las tareas desde la capital del país hasta Concepción, fue entregado a la firma Terminal Occidental SA (TOSA), de Conrado Hoeckle, por G. 124.000 millones.

Por último, el lote 3, para los trabajos desde Concepción hasta la confluencia de los ríos Paraguay y Apa, fue adjudicado a la empresa Artes y Estructuras SA, de Óscar Narciso Cohene Mendoza, por un monto de G. 126.000 millones.

Según los datos de Obras Públicas, en los tres frentes se prevé un estimado de extracción de entre 1.500.000 metros cúbicos y 2.000.000 metros cúbicos, que serán removidos del lecho del río a los efectos de mejorar la navegabilidad de la vía fluvial más importante de nuestro país.