La tendencia de la divisa estadounidense (dólar) frente al guaraní permanece al alza, esto pese al esfuerzo del Banco Central del Paraguay (BCP) en inyectar dólares, con lo que intenta frenar una mayor escalada de la divisa. El viernes último cerró en G. 7.572 al cambio interbancario que representa un aumento de 4,2% desde diciembre pasado, cuando cerró en G. 7.263.
Al respecto, Emil Mendoza titular de la Asociación de Casas de Cambio del Paraguay (ACCP), detalló sobre el movimiento cambiario actual y estimó que la tendencia de un dólar persistirá en gran parte de este semestre.
Según explicó, que esto se debe principalmente a factores externos que inciden en la suba del dólar, como el incremento del precio internacional del petróleo. Que a nivel local, ya tuvo su impacto en la suba del precio al público, tanto de emblemas privados (G. 400 por litro más), como de Petropar (G. 290 más por cada litro).
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Mencionó que ante la expectativa de suba en el precio, los importadores de petróleo están comprando productos, también alentados por la buena perspectiva para el agro, generando una mayor demanda del billete verde y por ende una mayor presión sobre el tipo de cambio a nivel local.
La suba del combustible si bien responde a un incremento del precio internacional, también se debe a la suba del dólar, ya que al comprar el producto con un dólar más apreciado, el valor final para el consumidor termina impactando en los costos al trasladar a la moneda local, detalló Mendoza.
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Impacto en demás bienes
Pero no solo los precios de los combustibles pueden verse afectados con la apreciación del dólar, ya que también afecta a varios rubros importados de la canasta como alimentos, artículos de electrónica, y demás. “Cuando el dólar sufre una apreciación dentro del mercado, muchas mercaderías que tienen una incidencia directa en el consumo básico, también suben. Además la suba del combustible indirectamente también afecta el costo de las empresas”, explicó Mendoza.
Otro elemento a considerar, según el titular del gremio de casas de cambios es que los importadores empiezan a “stockearse” en esta temporada con miras a las compras de fin de año, lo que normalmente trae una presión extra al tipo de cambio. Algunas consultoras privadas pronostican que el tipo de cambio cerraría este año en torno a G. 7.600 o más.
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Mayor demanda de bolivianos
Por otra parte, el cambio efectivo también viene acompañando esta tendencia de apreciación, aunque se encuentra un poco por debajo del cambio interbancario, a G. 7.520.
Una situación que se viene observando, según confirmó el titular de la ACCP es que se ha notado una mayor demanda por parte de ciudadanos bolivianos, ya que en el vecino país rige un nuevo esquema de control cambiario, algo similar que ocurrió en Argentina.
“Son varios los bolivianos que vienen a Paraguay y por medio informáticos, como por ejemplo adelantos de sus tarjetas de créditos, débitos, vienen y compran dólares y lo llevan a su país. Es parecido con lo que pasó con Argentina, pero no en esa envergadura”, explicó