“Con la ultrasonografía se puede medir la zona de lomo, uno de los cortes principales de carne, el cual está correlacionado a otros cortes de músculo. A mayor área de ojo de bife, en centímetros cuadrados, mayor conformación en otras partes del animal, sea cualquier corte trasero o delantero, que son los que más se requieren en los frigoríficos. Con respecto a la genética animal, lo que se observa en la ultrasonografía es altamente heredable, en relación de 0,30 a 0,40%. Este es un indicador de que la cría heredará las cualidades carniceras del padre”, confirmó el doctor.
Identificar a los mejores
“Con esta tecnología es posible identificar a los reproductores superiores. Entonces, cuando el productor desee introducir ejemplares nuevos a su rebaño, puede elegir los animales top, 10% superiores a nivel local como del extranjero. Luego, dichos animales podrán reproducirse por monta natural, inseminación artificial con semen fresco o congelado y, porque no, por transferencia de embriones. Para seleccionar a los reproductores, la medición de carcasa es un aspecto fundamental”, explicó luego.
Determinaciones
“Antes de proceder a la ultrasonografía es fundamental seleccionar los animales que se encuentran en las mismas condiciones ambientales y nutricionales, ya que no es lo mismo un animal criado a campo y otro a bozal. La parte nutricional está muy ligada a la genética; de nada sirve contar con un ejemplar de alta genética si no le damos las condiciones ambientales y nutricionales para poder desarrollar su potencial. En este sentido, la genética juega un 40% en la producción y la nutrición un 60%”, relató nuestro entrevistado.
Equipo para realizar el trabajo
“El equipamiento para realizar la medición de carcasa son el ultrasonido con su sonda; esta sonda envía imágenes ultrasonográficas que permitirán ver partes específicas, en este caso, el lomo del animal. Asimismo, el técnico que realice el trabajo debe contar con una computadora para almacenar la información y el software; otro insumo de mucha utilidad es el aceite vegetal, que se colocará sobre el lomo del animal antes de pasar la sonda”, destacó.
Procedimiento
A la consulta de cómo se realiza el procedimiento, el veterinario dijo: “Se debe verificar dónde se encuentra la última costilla y, entre la décimo segunda y décimo tercera costilla vierte el aceite en buena cantidad sobre el animal. Posteriormente, coloca la sonda entre las costillas para tomar la imagen del lomo, esta se copia en la computadora y posibilita observar toda el área del contorno del lomo. A la hora de la toma de imagen será necesario saber qué músculos están alrededor del lomo, de forma a delimitarlos bien y hacer una buena medición en laboratorio. El trabajo no dura más de 5 minutos, por lo que no perjudica el bienestar animal”.
Lo que puede imposibilitar la medición
“La suciedad, agua o pelo no permiten obtener una buena imagen del área de ojo de bife ni la grasa intramuscular, por lo que el animal debe estar seco y limpio. La lana no afecta la toma de imágenes, en el caso de presentarse pelo, proceder al depilado. Al obtener buena imagen de la grasa dorsal, grasa de cadera y marmoleado es factible determinar la calidad de la carne que presenta el ejemplar; sin dudas esta tecnología, además de definir a los ejemplares destacados, ayuda a lograr acortar los tiempos reproductivos, pues ya están definidos los animales para reproducción”, finalizó.