El consumo total de energía eléctrica del Paraguay durante el 2023 fue de 22.194,9 GWh, de los cuales los aportes de las distintas centrales hidroeléctricas se dieron del mogo siguiente: 19.514,7 GWh Itaipú, que representó el 87,52%; 1.884,9 GWh de Yacyretá, el 8,48%, y 795,3 GWh de Acaray, el 3,99% restante. De esta manera, el aumento del consumo nacional de electricidad fue del 12,41%, el más alto en los últimos 10 años, ya que en el 2014 se registró un aumento del 7,2% con relación al 2013.

La electricidad que se consumió en el país, el año pasado, equivale a la capacidad total de producción de Yacyretá, que es de 20.000 GWh, además dos veces la capacidad total de Acaray, de 1.000 GWh.

Siguen las pérdidas

Asimismo, las pérdidas siguen en el sistema eléctrico de la ANDE. Su presidente, el Ing. Félix Sosa, señaló que las pérdidas eléctricas actualmente ascienden al 27%, siendo aproximadamente el 6% en Transmisión y 21% en Distribución (12% corresponden a pérdidas técnicas y 9% pérdidas comerciales).

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“La ANDE viene realizando importantes inversiones en infraestructura, tanto en trasmisión como en distribución, de manera a mitigar las pérdidas técnicas, llevando adelante los objetivos estratégicos de la institución”, mencionó.

Destacó que las construcciones, ampliaciones y adecuaciones de subestaciones permitirán una disminución importante de las pérdidas técnicas. También resaltó la ejecución de obras, que consideró de suma relevancia en el ámbito de la distribución, como los cambios de conductores desnudos por protegidos, la construcción de nuevos alimentadores y la ampliación de los ya existentes en toda la República.

“Con las obras previstas y las que están en ejecución, se proyecta atender adecuadamente el servicio y, al mismo tiempo, disminuir los niveles de pérdidas técnicas en la empresa”, agregó Sosa.

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El titular de la ANDE mencionó también que están culminando los trabajos, con el apoyo de una cooperación técnica del Banco Mundial, para diseñar las acciones sostenibles que permitan la reducción de pérdidas en base a las mejores prácticas de empresas del sector eléctrico de países de la región, con altos índices de pérdidas y que, a través de la correcta gestión e inversión, lograron la reducción de esos índices.

En ese sentido, relató que en un avance preliminar del entregable, se identificaron tres frentes de trabajos, los cuales deben ser abordados por ANDE, dentro de su diseño, para combatir las pérdidas eléctricas.

Uno de ellos es el de los suministros en media tensión, principalmente, el sector de criptominería, que se ubicó en la zonas geográficas del Este y Sur del país, y que tienen un impacto importante en las pérdidas eléctricas actuales.

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“Este grupo de conexiones irregulares está siendo gestionado con la aplicación actual de tecnología en las redes de distribución, como la inteligencia artificial, el cual permite identificar los sectores de mayores pérdidas para priorizar las acciones en esos puntos y que son realizadas de manera diferenciada y conjuntamente con el Ministerio Público y la Policía Nacional, donde se han realizado importantes intervenciones a finales del año 2023″, detalló Sosa.

El segundo frente es el de suministros en franja media. Corresponden a clientes abastecidos en baja tensión, con consumos importantes. “Se identificaron varios suministros con actividades de comercios, supermercados, panaderías, de alto impacto, abastecidos desde la red de baja tensión, que cuentan con conexiones directas, derivaciones antes del medidor y manipuleos de sus equipos de medición, que es abordado con otra estrategia para la identificación de estos suministros, y serán objeto de intervenciones dentro del diseño de reducción de pérdidas”, apuntó.

Y el tercer frente es el de suministros en zonas vulnerables y territorios sociales. “En el año 2023, se han iniciado procesos de regularización en asentamientos y territorios sociales, con un criterio integral y social de mejora de calidad de vida en estos lugares”, explicó.

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Estos trabajo incluyen las mejoras de la redes de distribución en media y baja tensión, colocación de puestos de distribución y alumbrado público, así también, a través de una nueva modalidad de contratación, se incluye además, la instalación del puesto de medición incluido el poste, el nicho, la llave de protección y la acometida para el usuario.

“De esta forma se brinda a los usuarios de estos sectores una atención integral y garantizando seguridad en el conexionado de sus instalaciones, acompañado de campañas de uso eficiente de la energía eléctrica y ambiental”, agregó.

Sosa contó que en los últimos 100 días del 2023 regularizaron más de 1.000 suministros bajo esta modalidad.

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Medición inteligente

En el marco de reducción de las pérdidas no técnicas, la ANDE inició -con la incorporación de la medición inteligente- un proyecto de instalación de 5.000 medidores en el barrio Villa Morra de Asunción. “Este cambio constituye una de las innovaciones más importantes de la institución para la medición de energía eléctrica”, destacaron recientemente desde la ANDE. Además se realizó la ampliación de los medidores telemedidos para los grandes clientes; cabina de medidores en edificios de la capital, Ciudad del Este y Encarnación, según resaltó el presidente de la empresa estatal, Ing. Félix Sosa.