Pedro Halley, exgerente del IPS, reflexionó sobre la importancia de contar con una superintendencia de pensiones que establezca un control y marque los lineamientos a las diferentes cajas de jubilaciones que hoy operan en el sistema sin ninguna supervisión, todas con serios problemas financieros.
El experto en jubilaciones lamentó que por la falta de transparencia y de socialización de estos proyectos tan claves con todos los afectados, muchas veces se terminan truncando estas iniciativas tan necesarias.
Sobre el proyecto mencionó que está de acuerdo con la creación de una superintendencia, y aclaró que el rol del Estado es de contralor y garante del sistema, no es el administrador de los fondos, como muchos temen que pueda ocurrir, justamente por la falta de información clara sobre el tema.
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El control es clave
El exgerente del IPS ratificó que el control es un tema clave y más todavía cuando hay una historia previsional plagada de mal manejo, de fraudes, de pérdida de dinero.
Recordó que durante la crisis de los 90, el IPS perdió el 70% de sus reservas, más tarde en el 2000, la Caja Bancaria también entró en crisis por efecto de la quiebra de bancos, y debido a los malos manejos en Cajubi se regalaron unos US$ 500 millones a un aventurero canadiense, entre otros.
“Ahora Bataglia y su equipo están endeudando el fondo de salud. ¿Pero por qué pasa todo esto? porque sencillamente no hay control” expresó. No obstante, recomendó estar atentos a que ese control no sea para direccionar los intereses en el sentido político. Eso hay que cuidar y neutralizar, en ese sentido la participación de los aportantes en el Consejo será clave” dijo.
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Consejo debe tener fuerza
A grandes rasgos este borrador del proyecto es más resumido en comparación al primer plan que se había presentado en el 2018, pero con los mismos planteamientos solo que más genérico, expresó Halley.
“Algunos cambios con respecto al Consejo Consultivo es que se incorpora al sector obrero y patronal, pero falta incluir a los jubilados y quizás extender a más sectores como sector público, mipymes. Este consejo debe tener un nivel jerárquico, superior, hay que darle fuerza”, sugirió.
Cuidar las inversiones
Según Halley, este proyecto tiene a su favor planteamientos interesantes para los aportantes como es la diversificación de las inversiones. Mencionó que actualmente todas las cajas concentran sus recursos básicamente en 4 instrumentos: CDA, Ahorro a la vista, bonos de la AFD, títulos del tesoro.
Estima que los ahorros de las cajas, unos US$ 3.200 millones, están en el sector bancario, alrededor del 75%. “Es un gran riesgo tener todos estos ahorros concentrados en un solo instrumento”, expresó Halley.
Dijo que esta ley permite justamente diversificar los instrumentos para no concentrar los riesgos en un solo sector.
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Se debe socializar más
Si bien Halley reconoce la urgencia y necesidad de contar con una superintendencia de pensiones y jubilaciones, insta al Ejecutivo a la transparencia y a que socialicen el plan con todos los participantes del sistema, para que no se tenga de nuevo un revés como en el primer intento.
“Es un tema muy sensible que se debe explicar muy bien lo que implica, para no dar pie a informaciones erróneas sobre el tema”, dijo finalmente.
Dependerá del BCP
Al igual que el proyecto inicial, de aprobarse este nuevo plan, la nueva superintendencia pasará a depender del Banco Central del Paraguay al igual que la Superintendencia de Bancos, la de Seguros y posiblemente también cuando se apruebe la nueva Superintendencia de Valores. El borrador del proyecto menciona que el superintendente de pensiones será designado por el Poder Ejecutivo de una terna de candidatos elaborada por el directorio del BCP.