El presidente de la Cámara Paraguaya de la Construcción (Capaco), Daniel Díaz de Vivar, expresó que el sector de la construcción del país ve con mucha preocupación la intención de aumentar los gastos rígidos. “De ninguna manera se traducirá en un beneficio directo para la ciudadanía ni en la generación de condiciones para que el país aumente el producto interno bruto (PIB), sino que todo lo contrario. Se deja poco o nulo espacio fiscal para la inversión en infraestructura”, dijo. Aprovechó para insistir en que el Estado tiene que honrar sus deudas con las empresas constructoras, que asciende a US$ 400 millones.
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Recalcó que el Congreso ya aprobó dos créditos del Banco Interamericano de Desarrollo (BID) y del Banco de Desarrollo de América Latina (CAF) semanas atrás.
Cuando hay una deuda tan abultada con el sector que más efecto derrame produce sobre los diferentes sectores de la economía, todo el empleo está comprometido; el de la construcción propiamente y también de sectores que le proveen bienes y servicios”, destacó.
Piden PGN equilibrado
Por su parte, el representante de la Cámara Nacional de Comercio y Servicio del Paraguay (CNCSP), Ernesto Figueredo, observó que un presupuesto equilibrado es bueno para el país porque permite obtener previsibilidad y estabilidad, lo que posibilitará avanzar en el desarrollo de mejores políticas públicas.
“El ejemplo de un presupuesto irracional son los de Argentina y Venezuela, con tremendo impacto en el empobrecimiento de la gente. El desafío es educar y dar a conocer a la ciudadanía para que esta pueda exigir calidad del gasto y reducir los excesos y privilegios que dañan la imagen del Estado y pone en peligro nuestra democracia”, puntualizó.