Exportación real de electricidad no llega al 1% de la cedida en las binacionales

Entre enero y julio de este año, la exportación real de energía eléctrica rondó los 75.000 MWh, el 0,73% de la cantidad que cedió al sistema eléctrico brasileño y argentino en el mismo lapso. La tasa histórica de aprovechamiento paraguayo de la producción de Itaipú rondó el 17%, en tanto que la de cesión, el 87%. De Yacyretá usamos el 12,3% de nuestra parte, pero cedimos 87,7%.

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En los siete primeros meses del ejercicio en curso, la tasa de aprovechamiento del mercado paraguayo de la energía que generaron las centrales binacionales Itaipú y Yacyretá exhibió, porcentualmente hablando, una mejoría atendible.

En los primeros siete meses de 2022, la tasa de aprovechamiento local de la energía paraguaya en Itaipú exhibió una atendible proporción; sin embargo en los 38 años de producción la misma pierde fuerza, apenas 17,6% contra el 82,4% de energía cedida.

En Itaipú, de los 35.352.000 MWh que produjo la central paraguayo/ brasileña entre enero y julio, 17.676.000 MWh correspondían al Paraguay.

De esa cantidad, el Sistema Interconectado de la ANDE retiró 9.928.000 MWh (56%) y la diferencia, 7.748.000 MWh (44%) cedió a Eletrobras, sustituida el pasado mes por ENBPar.

No obstante, este mejoramiento de siete meses de aprovechamiento de la mitad paraguaya de la producción de Itaipú, pierde fuerza si consideramos su producción histórica. O sea entre 1984 y julio de este año.

En esos 38 años, del producto acumulado de la hidroeléctrica, 1.430.533.000 MWh correspondían al país, pero el mercado paraguayo utilizó solo el 17,6% (251.426.000 MWh) y cedió, en forma obligada según una controvertida interpretación del Tratado, 1.179.107.000 MWh. Ese excedente (82,4%) entregó a la empresa de referencia en carácter de cesión de energía, no de venta o exportación.

La situación en Yacyretá es parecida

Entre enero y julio último, 3.994.400 MWh generados por Yacyretá integraban el patrimonio del Paraguay, según el correspondiente Tratado.

En los primeros siete meses del corriente año, la Administración Nacional de Eletricidad (ANDE) utilizó 1.410.000 MWh (53,3%) y, la diferencia, 2.584.400 MWh (64,70%), debió cederla al sistema eléctrico argentino, de la que, según fuentes confiables, una parte significativa vendió al sistema brasileño, con precios de mercado, para que pudiera mitigar las asperezas de la sequía que con extrema dureza castigó a la región en el 2021 y principios del presente año.

En la relación Yacyretá/mercado eléctrico paraguayo, al considerarse sus 28 años de producción, la tasa de los siete meses de 2022 también se desinfla. Entre 1994 y julio de 2022, de la producción acumulada de la central paraguayo/argentina, 233.120.225 MWh pertenecían al Paraguay.

Visto que pudo aprovechar solo 28.690.437 MWh, en todo el período (12,3%) cedió a las empresas argentinas 204.429.788 MWh (87,7%).

La cesión, que en este caso adquiere ribetes más escandalosos porque en el Art. XIII del Tratado está escrito que el derecho argentino de adquisición del excedente paraguayo es solo preferente; sin embargo, en esos 28 años, las autoridades de turno de la entidad y del país, lo aplicaron como si fuese obligatorio y exclusivo para nuestros socios.

La exportación real de la ANDE

Para desarmar el contexto de mitos, no debe olvidarse que la exportación real del Paraguay es practicada por la ANDE, la que. coherente con la interpretación de marras de los tratados binacionales. vende solo la energía de su central hidroeléctrica Acaray.

En los primeros siete meses de 2022 la ANDE exportó a la Argentina 75.224 MWh, el 073% de lo que cedió en el mismo lapso, con tendencia a la baja, inclusive con relación al ejercicio precedente.

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