El pronóstico de variación del Producto Interno Bruto (PIB) para el 2022, muestra en su segunda revisión del año que la actividad agrícola fue revisada del -21,5% a -13%. Por su parte, la ganadería se corrigió a la baja, de -1,5% a -2,5%, debido, a las previsiones de un menor ritmo de faenamiento durante el segundo semestre, atendiendo a la reducción del hato ganadero, de acuerdo con el informe que presentaron el titular del BCP José Cantero y el economista jefe Miguel Mora en conferencia de prensa virtual.
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Mora detalló que en el sector secundario, se ajustaron a la baja los pronósticos de manufactura (de 0,4% a-0,1%) y construcción (de 4% a 3,5%), en tanto que, se revisó al alza la proyección para electricidad y agua (-0,7% a 2,8%). Asimismo informó que se prevé un menor ritmo de expansión del sector terciario, explicado por una caída en gobierno general y una desaceleración en otros servicios.
Mejora de la actividad comercial
En contrapartida, para la actividad comercial, el BCP prevé una menor contracción con respecto a la cifra del informe anterior. Así se espera que el comercio cierre con una retracción del 2,5% con respecto al 2021, en comparación a una retracción del 6,3% que proyectaron en abril último.
Por el lado de la demanda, detallaron que el consumo privado y la inversión permanecen con las mismas tasas de crecimiento proyectadas en abril, 2,6% y 3,6% respectivamente. Por su parte, el consumo público tendría un crecimiento negativo en torno al -5,5%, en línea con el plan de convergencia fiscal del Ministerio de Hacienda. Las perspectivas de las exportaciones e importaciones han mejorado, previéndose menores caídas con respecto a abril, según informaron los técnicos de la banca matriz en conferencia de prensa.
Ajuste al alza en inflación
Por otra parte, el equipo del BCP ajustó al alza su pronóstico para la inflación del presente año desde 8,2% de abril pasado, a 8,8% en la presente revisión, esto por las presiones que se siguen dando en varios rubros de la canasta básica entre ellos alimentos y combustibles. El BCP recurrió al alza de tasa de interés de su Política Monetaria (desde 0,75% que tenía en agosto 2021 a 8% tras el último ajuste de julio 2022) con el propósito de reducir el efecto inflacionario controlando el circulante de dinero y para mantener las expectativas ancladas. Para el 2023 esperan una inflación de 4,1%, nuevamente dentro del rango meta.
“Como estaba previsto, la inflación total y sus medidas de tendencia continuaron aumentando durante el segundo trimestre. Sin embargo, las magnitudes de estos aumentos fueron superiores a lo esperado. Esto elevó el punto de partida para las proyecciones, resultando en una mayor tasa de inflación interanual que la proyectada anteriormente”, explicó el economista jefe de la banca matriz.
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Inflación llegó al techo en segundo semestre
Por otro lado, Mora detalló que las menores presiones sobre los precios externos recientemente observadas, así como el moderado dinamismo de la actividad económica local -brecha de producto negativa- contribuirían a contener las presiones sobre la inflación doméstica en el mediano plazo.
De esta manera, a partir del tercer trimestre del año, se continúa previendo una moderación de la inflación hasta finalizar el 2022 con una tasa de 8,8% y 4,1% en el 2023, para converger a la meta durante el primer trimestre del 2024
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“Creemos que la inflación a inicio del segundo trimestre llegó a un techo, esa inflación va empezar a converger a niveles de 8% en esta segunda parte del año”, afirmó el titular del BCP José Cantero. Añadió que esto se debe a que hay mejores condiciones internacionales en cuanto a precio de alimentos y combustibles. “También tenemos que considerar el factor base, la inflación mensual estuvo en torno al 1%, pero a medida que estos precios se internalicen , la inflación va ir convergiendo al 8,8% para el cierre del año, expresó Cantero.
Dijo finalmente que el BCP sigue firme con el compromiso para tomar decisiones de política que sean necesarias. Dijo que si bien estas decisiones (suba de tasas de interés) tienen un costo inicial, mayor va ser el costo de no tomar decisiones y que la inflación no se controle.