Además de sus doble-doble, Carrera puso tres asistencias para el equipo de Ciudad de México, que recibió el primer partido de la serie y es dirigido por el argentino Nicolás Casalánguida.
El estadounidense Sek Henry, con 16 unidades, fue el mejor anotador de los Halcones del entrenador español Francisco ‘Paco’ Olmos.
Xalapa comenzó mejor el partido, al ganar 28-19 el primer cuarto, en el que la estrategia de Olmos fue ofender desde la larga distancia, comandados por dos triples y ocho puntos del estadounidense Clevin Hannah.
Los Diablos contaron con el respaldo de sus suplentes, pero la mala puntería los condenó a llegar con desventaja al segundo período.
La remontada de los Rojos comenzó en la segunda manga, en la que la protagonista fue la defensa de los de Casalánguida, que limitó a 14 puntos a los Halcones, su peor desempeño en ataque en el juego.
El manejador argentino no le permitió a los de Olmos tirar con comodidad de tres puntos, sumado a un dominio en la pintura que secó a Xalapa; además, los Rojos contaron con una actuación de cinco unidades del argentino Luciano González, su mejor arma que comandó a los Diablos a llegar 42-40 abajo al descanso.
En el tercer rollo, los escarlatas confirmaron su buen momento al ser liderados por nueve puntos del estadounidense Michael Smith y los primeros ocho del capitán argentino Santiago Scala, quien obtuvo seis de ellos con un par de triples.
Los Halcones volvieron a tratar de ofender desde lo más lejano, pero los Diablos provocaron que apenas acertaran cuatro de los nueve triples que intentaron para que llegaran 71-61 a los 10 minutos definitivos.
En el cuarto final, Carrera, quien vino desde el banco, tomó el control con cinco puntos del ataque de los Diablos, que aunque no contaron con un buen tino en sus tiros de campo, se las arreglaron para sentenciar 89-80 su remontada.
La serie continuará este viernes, con el segundo juego que también será en Ciudad de México.
Los Halcones buscan el quinto título de su historia para igualar al Fuerza Regia de Monterrey como el más ganador de la liga, mientras que los Diablos sueñan con el primero en sus vitrinas.