Gremio de exportadores de oleaginosas ve “buena voluntad” en negociaciones con Unión Europea

En comunicación con ABC Cardinal este viernes, José Berea, presidente de la Cámara Paraguaya de Exportadores y Comercializadores de Cereales y Oleaginosas (Capeco), comentó sobre el decreto emitido por el Poder Ejecutivo para la creación de una mesa de trabajo para evaluar la implementación de un sistema de trazabilidad ambiental de los productos de exportación, una exigencia de la Unión Europea para abrir su mercado a exportaciones paraguayas.

Aunque gremios de productores como la Federación de Cooperativas de la Producción o la Unión de Gremios de la Producción expresaron preocupación por la medida del gobierno, diciendo temer una hipotética injerencia europea en leyes paraguayas, Berea abogó por dar al Gobierno y a los representantes de la producción paraguaya que formarán parte de esa mesa de trabajo el beneficio de la duda.

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Enfatizó, además, la importancia para la producción paraguaya de “tratar de mantener todos los mercados abiertos”.

“La idea de cerrar un mercado nos preocupa y vamos a hacer todo lo posible para que (el mercado europeo) se pueda mantener”, dijo. “Tenemos que sentarnos en la mesa para poner las cosas que se pueden hacer desde Paraguay y decirles qué es innegociable”.

Sobre la designación del ministro de Industria y Comercio, Javier Giménez, como “coordinador” de la negociación con la Unión Europea, dijo que “desde Capeco no tenemos nada en contra”.

Agregó que el presidente Santiago Peña prometió a los productores que el Gobierno “no iba a comprometerse a cosas que atenten contra el país”.

“Buena voluntad”

Señaló que es falso que la Unión Europea represente solo el 4 por ciento de las exportaciones paraguayas de soja e indicó que, de forma indirecta, a través de soja exportada a países vecinos como Argentina que luego es de nuevo exportada a Europa, más del 30 por ciento de la soja que produce Paraguay termina en la Unión Europea.

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Todavía estamos sentados en la mesa, hay que escuchar todas las partes”, insistió. “Creo que hay buena voluntad. Los riesgos y las amenazas las comparto, pero tenemos que dar el beneficio de la duda a que, si dicen que nos van a dar una herramienta ágil, esperemos a verla finalizada”.

“Ninguno de los gremios que estamos en esto tenemos un cheque en blanco, es un tema muy sensible para los privados y el gobierno”, agregó.